En Colombia, la cuota de alimentos es una obligación legalque tienen los padres para asegurar el sustento de sus hijos, incluyendo alimentación, vivienda, educación y salud, entre otros aspectos esenciales. La cuantía de esta cuota no está preestablecida por una tarifa fija, sino que depende de varios factores, entre ellos las necesidades del menor y la capacidad económica del padre o madre que debe proveer la cuota.
Según el artículo 24 del código de Infancia y Adolescencia los padres tienen la responsabilidad de proveer los alimentos necesarios para sus hijos, sin importar su situación laboral. Esto significa que incluso si un padre se encuentra desempleado, sigue siendo responsable de garantizar el sustento de sus hijos
«Los niños, las niñas y los adolescentes tienen derecho a los alimentos y demás medios para su desarrollo físico, psicológico, espiritual, moral, cultural y social, de acuerdo con la capacidad económica del alimentante. Se entiende por alimentos todo lo que es indispensable para el sustento, habitación, vestido, asistencia médica, recreación, educación o instrucción y, en general, todo lo que es necesario para el desarrollo integral de los niños, las niñas y los adolescentes. Los alimentos comprenden la obligación de proporcionar a la madre los gastos de embarazo y parto».
En casos donde el padre o madre no tiene empleo o ingresos fijos, aún está obligado a contribuir a la manutención de sus hijos, pero la cuantía de esta contribución puede ajustarse a su capacidad económica actual. Si no tiene trabajo, se consideran otros posibles ingresos o recursos que pueda tener, como inversiones, rentas de propiedades, o apoyo de familiares. Además, la justicia puede tomar medidas para garantizar que se busque empleo o se generen ingresos de alguna forma.